jueves, 12 de marzo de 2009

"No te preocupes. También he olvidado tu nombre"

Cuando abrí aquel libro sin palabras que leer, comprendí que debía contarlo yo, por eso, pensé en tus piernas cuando caminaban cubiertas de esas medias transparentes, venias hacia mi, empezabas a quitarlas pero te desvanecías en cartas que acababan con nuestra compañía. Toque el timbre de tu casa y no estabas, tu madre me contó que era lo que había sucedido, pero una mirada extraña se apoderaba de la joven madre, apoyo su mano en mi pierna y me besaba timidamente...

Ate mis agujetas y salí corriendo. No comprendía como acabó todo de una manera tan incoherente e instintiva. Al mirar al cielo, las nubes amenazaban con una lluvia de verano. Trase con mi dedo lineas sobre un vidrio empañado, un poco mas calmado y pensando en la nueva Sra. que podría ser mi madre, igual sonreí.

Entré a un baño público a inyectarme mi insulina, mojé mi rostro, vi en mi bolsillo que no me quedaban monedas para regresar a casa, tendría que caminar, bajo un cielo gris. La gente golpeaba al pasar, todos caminan de prisa, me ahogo en la multitud. Me detengo un momento y saco mi cámara fotográfica para retratar el salvajismo humano conglomerado.

En la periferia de la ciudad mi celular ya no conseguía señal, con ganas de orinar, veía a mi alrededor gente pasar, observo que en una casa había una señora de edad, cruzo el portón de madera y una niña con los pies embarrados, me recibe de un abraso y con una sonrisa en su rostro, le pido permiso a la señora para usar su baño y me dice que tendría que esperar porque su hijo esta en el ahora. La niña seguía hablando y mostrándome su colección de nueces, un tesoro. Al salir del baño la niña me invitaba a quedarme y jugar con ella, me enseño una mortadela de barro, de ahí entendía sus pies sucios. Insistía en que me quedara, pero tenia que llegar a casa. Siempre me acuerdo de ella, me regalo una de sus nueces.

Me quedo al alero del puente. Regreso a mi pueblo y me siento extranjero.
Observo mis mensajes de texto y es inevitable acordarme de ti. ¿Que he dibujado o pintado? En la mañana vi un programa donde aparecían tres pintores chilenos, me dejaba tranquilo al ser el único de mi hogar en entender su idioma.
A veces siento que debo retroceder, ante lo ya avanzado, siempre pienso en mis sueños, no quiero estropearlos con las habladurías de la gente. Me abre mi mamá, tomo una taza de café, me invita a otro y a otro después, me repite las mismas preguntas cada cinco minutos, es como si tuviera memoria a corto plazo, su cerebro ya no es capaz de retener mayor información.
voy hacia mi pieza, cuarto improvisado, me tiro sobre la cama y solo quedo mirando la ampolleta encendida, todo es silencio cuando miras una ampolleta. Coloco aquel cd que me enseño sobre algunos momentos extremos que tiene la vida
Miro mis manos sucias con carboncillo, hace cuanto que no la dibujo? "No te preocupes. También he olvidado tu nombre".
Hay tanto tiempo para reconstruir cuando estas de viaje en un bus y miras por la ventana.

No hay comentarios: